lunes, 1 de octubre de 2007

Ya pueden leernos la mente


Neurocientíficos, entre ellos españoles del CSIC, han publicado recientemente en la revista Nature Neuroscience un trabajo en el que aseguraban haber encontrado las bases bioquímicas que rigen cuestiones tan personales y en apariecia tan abstractas como la ideología o la personalidad.


Según el estudio parece haber diferencias en las reacciones a estimulos entres personas que previamente se había declarado liberales o conservadoras. Se realizaron electroencefalogramas a 43 hombres y mujeres diestros mientras se le sometía a estimulos que se repetían pero que en alguna ocasión cambiaban Cuando ocurría esto último, en la gran mayoría de los sujetos que previamente se habían declarado liberales se detectaba una actividad más intensa en un área de la corteza cerebral relacionada con los conflictos, lo que sugiere "una mayor sensibilidad neurocognitiva" a los cambios.


Ya se han pronunciado voces en contra de estos estudios, que reclaman que algo tan profundo e íntimo como la personalidad o la ideología pueda traducirse en una mayo o menor actividad de una determinda molécula en una zona concreta del cerebro y detectada con un scanner cerebral.


A ello contesta Alberto Ferrús, director del Instituto Cajal de Neurociencias del CSIC, en Madrid: "La sensación de estar enamorado o enfadado, la religión... todo se traduce en moléculas, en algo físico que hay en el cerebro". "Es normal que cerebros que piensan distintos actuen de forma distina ante diferentes situaciones"


Todo esto ha sido gracias a los avances que se han producido en el campo desde la década de los 90, sobre todo a las Tomografías por emisión de positrones (PET), que detectan el metabolismos de las distintas aéreas del cerebro en vivo y en directo, ante diferentes estudios.
Aunque resulte reduccionista, somos en base eso. Nuestro verdaderos ser es un complejo juego bioquímico de sustancias, secretadas en las conexiones neuronales en diferentes concentraciones según el momento y el tipo de experiencias que vivimos, pero también se le puede llamar Alma.

1 comentario:

Alfonso Saborido dijo...

Qué le lean la mente a Esperanza Aguirre y Ana Botella, debe ser tremendamente curioso :)