El afán de Mariano Rajoy y del PP por extensión de volver a poder parece no tener límites. La última de sus ocurrencias es el de emitir un mensaje institucional (como si fuese algo del Gobierno) en el que pide a los españoles que mañana viernes, Fiesta Nacional, que "manifiesten con franqueza" su orgullo de ser españoles y hagan "algún gesto que muestre lo que guardan en su corazón".
Acentua también que los españoles celbren especialmente este día, por motivos que todo el mundo conoce. Añade que España es una nación que desea que los españoles dejen constancia que estàn contento de serlos y recuerda que el viernes "se va exhibir y honrar la bandera" el símbolo que, junto a la Corona, cree que mejor representa a España en el mundo.
Rajoy vuelve a defender la bandera constitucional a ultranza, sin haberse percatado nunca de las anticonstitucionales que ondeaban alegremente en sus manifestaciones, y con las que algunos de los miembros de su partido se habían fotografiado. Es decir Rajoy está haciendo de Jefe de Estado, de Rey (madre mía)
Mire Sr. Rajoy, lo que mejor honra a España en el mundo son los propios españoles, a los que parece que usted no tiene ningún respeto, al intentar tratornos como subditos suyos. La patria Sr. Rajoy, no es solo un trozo de tela muy grande, con dos colores; es algo más, mucho más profundo, es una manera de sentir, de vivir, de pensar. La patria es nuestra familia, nuestra pareja a la que amamos, nuestros amigos; algo que sobrepasa las fronteras y los límites de los Estados. Deje usted celebrar a los españoles (y no españoles que vivan en España) incluso a los que libremente dentro del Estado no se sientan como tales, celebrar el día 12 como quieran.
Dios (nos) salve de Rajoy.
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